Ante la atenta mirada de la creme del urbano local -Milo J, Lit Killah, Duki, Bizarrap, Nicki Nicole, Emilia, Cazzu y otros siguieron el show desde la platea-, Scott dio una
muestra perfecta de la morfología sonora del trap, americanísimo género que basa su identidad en la exageración: tanto graves como agudos juegan en sus límites dando forma a una música tan directa como visceral.