Fue un duro golpe para el Ejecutivo europeo, que recurrió a la instancia superior. En noviembre de 2023, el abogado general del tribunal, una figura que funciona como una especie de
fiscal, emitió un dictamen que alegaba que esa primera decisión judicial era incorrecta, que tenía errores jurídicos y que el tribunal debía volver a juzgar sobre el fondo del asunto. Así lo hicieron los jueces y hoy cayó la decisión definitiva, que ya no puede recurrirse. Apple deberá devolver 13.000 millones de euros a Irlanda.