El Presidente y su asesor están desesperados porque no están los números y el Senado podría voltear los fondos extra este jueves. La campaña en las redes
Javier Milei va a fondo por una cuestión que obsesiona a su asesor, Santiago Caputo: los 100 mil millones de pesos para la SIDE. El Presidente y su Robin están desesperados porque no están los números y el Senado podría voltear los fondos extra el jueves.
La Cámara alta estuvo al borde de hacerlo el jueves pasado, pero Caputo intervino para que se patee una semana más la sesión. El DNU que le asigna ese monto a la Secretaría de Inteligencia ya tiene media sanción de rechazo en Diputados.
Justo ese día sucedió un hecho llamativo. Repudiable y estremecedor, pero llamativo. Llegó un paquete a nombre de Nicolás Pino en la sede de la Sociedad Rural. Lo abrió su secretaría y generó una pequeña explosión y hubo fuego. No hubo heridos de gravedad.
La versión que filtró el Gobierno, por ahora, es que se trató de un acto intimidatorio de un "grupo de anarquistas veganos" contra La Rural. En la Casa Rosada también gira otra versión, un tanto más oscura.
Una fuente reservada relató a El Destape que "hay personas relacionadas al Gobierno que no son funcionarios y que conocen movimientos que hubo en los estacionamientos de La Rural por las noches". Y remató: "Esto puede ser un mensaje hacia ellos". Uno de los que conocería estos movimientos es Pino, quien es amigo de Javier Milei, según describió el entorno del mandatario a este portal.
Hay versiones que indican que la nueva SIDE fue craneada en ese tipo de reuniones de hace meses en el estacionamiento de esa entidad a horas de la madrugada. Espías, exfuncionarios de la vieja SIDE y algún asesor de Milei. Por ahora versiones que algunos protagonistas niegan en privado.
El último en sufrir un hecho similar fue un tal José Luis Vila. Fue en julio de 2018 y entonces era asesor en Asuntos Internacionales del ministro de Defensa, Julio Martínez, bajo el Gobierno de Mauricio Macri. Le llegó a su edificio en Recoleta una bomba TNT con las frases "José Luis Vila ladrón" y "José Luis Vila traidor" que nunca detonó.
Vila, radical del nosiglismo, es especialista en seguridad, defensa e inteligencia y volvió a ser funcionario bajo este Gobierno de Javier Milei. Es el titular de la Secretaría de Estrategia Nacional, que depende de la Jefatura de Gabinete, a cargo de Guillermo Francos. En una entrevista en 2021, Vila fue a fondo contra la administración Cambiemos: "Con Macri se espió a la propia tropa, a los políticos de su propio partido, como un dueño de estancia". Hay quienes dicen que Vila fue uno de los que creó la nueva estructura de Inteligencia libertaria junto a Santiago Caputo y otros exfuncionarios de las diferentes tribus de la SIDE. ¿Habrá sido en esas reuniones en La Rural?
Lo que siguió al explosivo en la sede de Palermo de La Rural fue una movida gigantesca en redes sociales con los trolls que comanda Caputo desde su despacho en Casa Rosada. Intentaron instalar la supuesta vuelta de Montoneros junto a quejas de que se necesitan fondos de la SIDE para evitar este tipo de situaciones.
Hubo tres tuits clave en esta historia: uno es de la cuenta fantasma de Caputo. Allí deja clara la línea de los trolls: "Hoy se podría haber muerto una persona (o más). Porque estamos indefensos. Porque se la afanaron toda. Porque usaron la SIDE para espiar hasta a los propios". Otro mensaje es el del nuevo jefe de bloque de Diputados de La Libertad Avanza en la Provincia de Buenos Aires, Agustín Romo. "Pero para Macri está mal tener un Servicio de Inteligencia bien financiado". Y el último de Javier Lanari, Nº2 de Manuel Adorni: "Lo que pasó hoy en la Sociedad Rural es un atentado a la democracia. Hay grupos políticos que añoran los '70. Pretenden instaurar un clima de violencia y terror ante el avance de las ideas de la libertad".
La línea comunicacional del Gobierno con mucho eco en redes fue exhibir que hay un revival de guerrillas de los 70', pedir plata para la SIDE y pegarle a Macri. Es que el expresidente hizo un pedido expreso para voltear los 100 mil millones de pesos para la SIDE en el Congreso, en medio de su guerra con Caputo. ¿Cómo votarán ahora los senadores PRO? Los diputados macristas obedecieron al pie de la letra el reclamo del líder amarillo.
Esta historia de los fondos de la SIDE tiene un comienzo y es el 16 de julio. Ese día, una altísima fuente del Gobierno le reveló a El Destape que se estaban tomando "mayores cuidados porque hubo una información vinculada a la seguridad del Presidente hace un par de semanas". Describió "un hecho en Buenos Aires que requirió darle importancia". Se refería a una amenaza concreta contra el jefe de Estado. El Destape ese día chequeó con otras fuentes, como la Casa Militar y otros ministros de cercanía de Milei, y todos negaron esa información. Incluso, la seguridad del Presidente dijo que "no hay cambios en los últimos días". Esa misma fuente contó que el hecho puede estar relacionado a la decisión última del Gobierno de declarar a Hamas como "organización terrorista". En ese momento, el grupo islamista palestino respondió y dijo que se trataba de “una decisión equivocada y sesgada” y lo llamó a Milei a “retractarse”.
Una semana después, el 23 de julio, el Gobierno lanzó el DNU con los fondos extras para la SIDE. La oposición puso el grito en el cielo y se armó un importante cordón para tener los votos en Diputados. Con los del PRO, hubo paliza en la cámara baja. Macri le metía el primer gol a Santiago Caputo.
Luego, siguió la revancha. Enfocado en las redes sociales, Caputo puso en campaña a los trolls a defender a como dé lugar los fondos de la SIDE y señalar a los diputados amarillos y a Macri que habían rechazado el DNU en el Congreso. Hubo lluvia de fotos de Macri disfrazado de terrorista árabe. En Twitter, el trollerío libertario inclinó la cancha.
En el medio se dio a conocer que la SIDE ya había devengado el 80% de los 100 mil millones. Si el Senado rechaza el DNU, el Gobierno deberá devolverlo o tendrán que desfilar varios por tribunales porque lloverán denuncias.
Caputo, casi derrotado, apenas consiguió patear una semana más la sesión que puede voltearle los fondos. A viva voz, en Casa Rosada, el asesor de Milei refunfuña: "Hasta que los del PRO no me devuelvan mis 100 millones de dólares no les atiendo más el teléfono". Por ahora, no volvió a hablarse más con ninguno. Ni con Cristian Ritondo, jefe de bloque de Diputados macristas, con quien había cultivado una buena relación.