Aproximadamente hace siete meses, cuando se comenzó el proceso para localizar a una persona cuyo paradero se desconocía, si estaba con vida o secuestrada, el gobierno argentino ha hecho un despliegue
cauteloso y discreto de sus capacidades, contando con la cooperación de otros países que se han brindado con total confianza, explicaron. Todo "sin filtrar información a los medios para preservar la integridad y asegurar las condiciones de negociación y liberación, que culminaron exitosamente con la mediación de Qatar, sin intervención de ex funcionarios o aportes externos al actual gobierno nacional".