Rafael Báez, conocido como “El cartonero”, dejó el anonimato durante el juicio contra el excampeón mundial de boxeo, Carlos Monzón, al declarar como único testigo en el crimen de Alicia Muñiz,
ocurrido el 14 de febrero de 1988.
Rafael Báez, conocido como “El cartonero”, dejó el anonimato durante el juicio contra el excampeón mundial de boxeo, Carlos Monzón, al declarar como único testigo en el crimen de Alicia Muñiz,
ocurrido el 14 de febrero de 1988.