Los gastos de funcionamiento, como explican desde el Rectorado, representan solo el 10% del presupuesto universitario. El otro 90% son salarios, que, señalan, siguen perdiendo un 35%, desde diciembre, comparados con
la inflación. El jueves los gremios rechazaron la propuesta salarial de la Secretaría de Educación, de un aumento del 8%.