Está claro que Milei juega políticamente en la designación de los nuevos miembros de la Corte y lo dejó marcado al nombrar a los dos postulantes sin consultar a Horacio Rosatti,
presidente del Tribunal, ni a Carlos Rosenkrantz, ni al propio Maqueda, a quien jubiló 9 meses antes. Pero hay que detenerse en este punto, porque para reemplazar al ministro deberá modificar el decreto 222/03 que habla de cubrir una vacante, pero no hace mención a postular a un candidato antes de que se genere el lugar.