Es un lunes especial para River. Y no porque jugará ante Banfield por la Liga Profesional, con la intención de recuperar la ventaja sobre Talleres, su inmediato perseguidor, sino también por una
Es que el club formalizó un acuerdo entre el club y la Agencia de Administración de Bienes del Estado, por el que se le cederá los terrenos que están anexos al Liceo Naval, detrás del Museo de Memoria ESMA y a 1.000 metros del Monumental. De esa manera, la institución de Núñez contará con un predio de 7,3 hectáreas, el cual lo tendrá de manera gratuita y su uso será por tiempo indeterminado.
El predio, de 73.362 meteos cuadrados, se trata de un terreno ubicado en orillas del Río de la Plata, entre la avenida Lugones, el arroyo Medrano y Tiro Federal.
Así, mientras se avanza en la finalización de las obras de remodelación y ampliación de su estadio, River ya piensa a futuro y prepara una gran inversión, que será de 10 millones de dólares, en un lote que está proyectado- como se mencionó- para que sea un nuevo espacio de entrenamiento de alto rendimiento para las divisiones formativas, tanto para hombres como para mujeres.
Además, es un lugar que representará mucha mayor comodidad para los chicos de la pensión, que en un futuro contarán con nuevas instalaciones además de las canchas auxiliares del club, del propio River Camp y del predio de Hurlingam para fútbol amateur, que igualmente se podría utilizar para otros eventos.
El nuevo terreno está delimitado por la Avenida Cantilo, la calle Tambor de Tacuarí, el Arroyo Medrano y el nuevo Tiro Federal y dispone actualmente de cinco canchas de fútbol, una de hockey y otra de rugby. Y no se trata de un lote que River encontró ahora: durante la gestión de Rodolfo D’Onofrio ya empezó a pensarse en la incorporación de estas siete hectáreas en las que incluso hacia 2018 se había planteado la posibilidad de construir un estadio Monumental nuevo y más moderno allí, una idea que se dejó de lado porque se dio paso a la remodelación actual en Udaondo y Figueroa Alcorta.
Pero las tierras de la Armada que utilizaba el Liceo Naval siguieron estando en la mira de River, que encontraría para esa época una traba judicial: por aquellos años resultaba imposible escriturar porque esos lotes, al estar tan cerca de donde funcionó la ESMA -uno de los principales y más salvajes centros clandestinos de detención de la última dictadura militar-, fueron investigados -con una cautelar de por medio que impedía cualquier modificación- por el Equipo Argentino de Antropología Forense. Ya cerrada aquella causa, el camino se allanó y el acuerdo pudo avanzar
De esta manera, River sigue creciendo y agrandando el club. Con nuevas tierras. Con más patrimonio. Y con un futuro pensado para agigantar su ya enorme cantera de jugadores.