Un escribano de 56 años murió en las primeras horas de este viernes por un paro cardiorrespiratorio provocado por el miedo y la tensión que vivió en medio de un robo, cuando al
Según fuentes ligadas a la investigación, el episodio ocurrió en una vivienda ubicada en la calle 38 entre 11 y 12, en una zona conocida como Barrio Norte. Allí fue que al menos cinco delincuentes armados ingresaron a la propiedad donde se encontraban la dueña y su hijo.
Los ladrones lograron llevarse mil dólares y escaparon en un auto blanco. Fue en ese momento que la víctima, identificada como Esteban Rafael Morcillo, se desplomó en un intento por querer evitar que se escapen.
"Ingresaron a la casa y estaba la dueña con su hijo, que salió corriendo a pedir ayuda. Nos dijeron que murió de un problema cardíaco", precisó un testigo del hecho en diálogo con el diario El Día, en medio del dolor de los familiares, amigos y vecinos que llegaron hasta la puerta del hogar impactados por la triste noticia.
Vecinos que advirtieron la situación lograron llamar a la ambulancia y al llegar los médicos realizaron trabajos de reanimación, pero no pudieron salvarle la vida.
En ese marco, la fiscalía a cargo del caso espera ahora los análisis de las cámaras de seguridad instaladas en la zona, que podrían haber registrado imágenes clave tanto del arribo como la huida de los asaltantes que desataron la tragedia en La Plata.
Se descompensó en medio de una violenta entradera y murió
En agosto del año pasado un hombre de 76 años murió debido a una descompensación que sufrió por los nervios al ser víctima de una entradera mientras estaba en su casa, en la localidad de Lanús Oeste, partido de Lanús, en el Sur del Conurbano bonaerense.
Los ladrones estuvieron cerca de una hora dentro del domicilio de la víctima, en el que también se encontraba su esposa. Apenas se fueron, el hombre sufrió un infarto que le provocó la muerte casi instantánea.
Aunque pasaron aproximadamente una hora revolviendo la casa en busca de acrecentar su botín, los ladrones huyeron del lugar llevándose únicamente 300 dólares en efectivo y algunas armas de fuego que el propietario, identificado como Norberto Veracruz, jubilado, de 76 años de edad, tenía guardadas.
En cuanto los ladrones se fueron, la mujer empezó a forcejear hasta que logró desatarse. Cuando empezó a hacer lo mismo para ayudar a su esposo, Veracruz sufrió un soponcio y cayó al piso, desmayado.
De inmediato la señora llamó a emergencias y rápidamente llegó al lugar una ambulancia del SAME. El personal de salud intentó reanimar al hombre pero fue imposible, había fallecido a causa de un infarto.
DB
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