El horror de otro femicidio sacude ahora desde la localidad bonaerense de Batán, donde el cuerpo de Valeria Luján González (28) apareció en un pozo ciego, con signos de haber sido
El primer dato de donde podía encontrarse Cechetto se tuvo en la tarde del sábado, cuando su camioneta Amarok apareció en la playa de Miramar, unos metros dentro del agua, en una curiosa foto que admitía varias interpretaciones, incluso hasta la de un posible suicidio de Cechetto. Sin embargo, los rastrillajes en las aguas cercanas no dieron resultados, y finalmente la policía descubrió al sujeto caminando en un sector de Miramar, por lo que fue inmediatamente detenido, y ahora se aguarda su indagatoria ante la fiscal Romina Díaz a cargo de la UFI N 6. La funcionaria judicial había calificado la causa como femicidio y dispuesto la realización de la autopsia en la tarde del sábado.
González había sido vista por última vez durante la mañana del viernes cuando salió de su casa alrededor de las 8:30. Durante la jornada no se comunicó con nadie, una situación que no era rara ya que se había alejado un tanto de su familia desde que se había unido a Cechetto, pero lo que si llamó la atención de sus familiares fue que no asistiera al cumpleaños de su madre o la llamara por teléfono.
Luego de la denuncia, el cuerpo de Valeria fue encontrado en el pozo ciego detrás de la casa ubicada en la calle 133 y 122, sobre la ruta provincial 88. desde ese momento comenzó la búsqueda de Cechetto, que tenía un negocio de herreria en Batán.
Femicidio en Córdoba: discutió con su ex pareja y la asesinó en plena calle
"Hoy solo puedo decir que escuchen, ayuden y presten atención a esa amiga, hermana, compañera de trabajo, familia. Para darles una mano que no están solas, que se puede salir si dejan de hacer la vista gorda. Hoy lamentablemente perdimos a mi prima, de la peor manera, de la cual jamás nos hubiéramos imaginado, de la que jamás desearía que alguien lo viviera”, publicó una prima de Valeria en sus redes sociales, agregando que "ella nunca se fue, a Vale la mataron, la mató el padre de su bebé, la persona con la cual había dormido horas antes, la misma que se paseó por todo Batán sin sentir un poquito de culpa, sin importarle que le arrebató la vida a la mamá de su hijo”.
Cechetto fue visto por última vez la noche del viernes. Los hermanos de Valeria, que ya habían denunciado su desaparición, y cuando le reprocharon al sospechoso "no estar buscando a su mujer", este se fue del lugar en su Volkswagen Amarok azul.
Pocas horas después del hallazgo del cuerpo de Valeria, la camioneta de Cechetto apareció sin ocupantes en el mar: personal del Comando de Patrullas de Miramar descubrió el rodado que se encontraba en la zona del Vía Crucis del Vivero Florentino Ameghino. El vehículo fue rescatado de ese lugar por los bomberos de Miramar, para ser sometido luego por la Justicia a los peritajes correspondientes:
Al revisar el lugar, los investigadores encontraron la huella de recorrida del vehículo sobre el terraplén hacia una caída de diez metros de altura sobre la bajada de la playa. Por este motivo, las autoridades pensaron que Cechetto podía haberse suicidado o simulado un suicidio.
Aunque no había denuncias concretas de violencia, los familiares de Valeria señalaron que se había mantenía prácticamente aislada de su familia y amigos desde que comenzó su relación con Cechetto. Ante tan espantoso final, se desatan ahora las conjeturas en procura de signos o datos que pudieran haber ayudado a evitar lo sucedido, pero los allegados de González admiten que no la habían escuchado hablar de violencia familiar.
El crimen de Valeria se convirtió en el tercer femicidio cometido en la primera semana del año. Los otros dos ocurrieron en el partido bonaerense de Lomas de Zamora y en la ciudad entrerriana de Paraná.
HB
