"Ritmo Cansino": miles de vacunas que llevan 21 días en la heladera podrían ser segundas dosis de Sputnik

Sociedad
Lectura

Cuantas más vacunas contra el coronavirus haya conservadas en las heladeras, menos argentinos tendrán su primera o segunda dosis suministrada. ¿Qué hay hoy en las heladeras de las provincias? La gran

mayoría son de Sinopharm. También hay Sputnik 1 y un remanente de Moderna para menores con comorbilidades. Escasean las de AstraZeneca y las Sputnik 2.

Esas dos vacunas clave permitirían al país avanzar más rápidamente con el objetivo de saldar los esquemas de vacunación. Si bien en agosto el Gobierno apretó el acelerador tras su promesa de completar 7 millones de esquemas, el porcentaje de argentinos que aún espera es el 60 por ciento de los mayores de 18 años y el 72 por ciento de toda la población.

La burocracia rusa es una de las trabas: 2,6 millones de segundos componentes que produjo el laboratorio Richmond en Argentina, con el antígeno que envía el Instituto Gamaleya, dependen aún de la liberación que se arroba la administración moscovita. Pero el pantano no es exclusividad del equipo de Vladimir Putin. El argentino tiende a coquetear con otros atascos.

Entre varias situaciones inexplicables que han demorado la campaña de vacunación en Argentina, se suma ahora la de la vacuna bautizada Convidecia, de Cansino. El 6 de agosto, hace 21 días, llegó al país el primer lote de 200 mil dosis, de los 5,4 millones que compró el Gobierno. Siguen en la heladera de Nación, dado que no fueron distribuidas.

BANER MTV 1

Este desarrollo chino es unidosis, y tiene la particularidad de estar hecho en base al adenovirus 5, el mismo que utiliza el segundo componente de la Sputnik V como vector viral. Por eso, cuando comenzó el ensayo local de combinación de vacunas, se pronosticó que la de Cansino sería la candidata con más chances de ser el reemplazo natural ante la escasez de la rusa.

La sede de Cansino en Tianjin. Foto: Reuters

La sede de Cansino en Tianjin. Foto: Reuters

Luego, los resultados de los ensayos de combinación demostraron que el complemento de la Sputnik 2 no tenía que ser necesariamente un calco de la original: vacunas con otro tipo de tecnología también podían ser una alternativa. Incluso se determinó que la vacuna de Moderna, de ARN mensajero, es la que en la suma de anticuerpos mejor respuesta proporcionó.

Eso no quita que las vacunas de Cansino puedan convertirse en una opción, sobre todo al observar que las otras vacunas habilitadas como segundas dosis de la Sputnik, AstraZeneca y Moderna, no abundan. Cuando lleguen más vacunas de la de Oxford deberán ser utilizadas indefectiblemente dentro de unesquema homólogo.

Por otro lado habrá vacunas de Pfizer, cuyo primer lote de 580 mil dosis -de un total de 20 millones- el Gobierno anunció que llegará en septiembre. Sin embargo, éstas no podrían ser usadas como segundas dosis de la Sputnik V -si bien ensayos europeos avalan esa mezcla- porque ya se prevé su aplicación a menores de 18 años sin comorbilidades.

La vacuna Sputnik V producida en Argentina por Richmond.

La vacuna Sputnik V producida en Argentina por Richmond.

Todo lo cual indicaría que las vacunas de Cansino podrían ser una alternativa oportuna para tapar eventuales baches. Sin embargo, según pudo saber Clarín, los ensayos de combinación no han avanzado según lo previsto. En la Ciudad y en Córdoba, que participan de este experimento, aseguraron no haber recibido las dosis que necesitan para aplicarlas en los voluntarios. A San Luis llegaron 80 dosis, pero aún no la orden de comenzar el ensayo.

¿Qué había dicho la ministra Carla Vizzotti cuando llegó el lote de 200 mil dosis el 6 de agosto? Que trabajaban “para que también se pueda incorporar inmediatamente al protocolo de combinación de esquemas, para agilizar lo más rápido posible la segunda dosis”. Y que “otro rol” que podía tener era usarla en una “sola dosis para tener una vacunación completa".

Según trascendió, el tema habría sido tratado en la Comisión Nacional de Inmunizaciones, el 13 de agosto. Al parecer, evaluaron varias alternativas: desde utilizarla en mayores de edad que aún no recibieron siquiera la primera dosis, hasta destinarla como refuerzo recién a partir de enero de 2022. Todo esto sucede mientras las segundas dosis se necesitan hoy.

Aplicación de una segunda dosis de Moderna, en Córdoba: Foto: La Voz del Interior

Aplicación de una segunda dosis de Moderna, en Córdoba: Foto: La Voz del Interior

Desde China, ejecutivos del laboratorio Cansino llamaron hace unos días a la Argentina. Querían saber si las vacunas que enviaron hace tres semanas se habían aplicado en el país. El laboratorio debe administrar los próximos lotes a medida que China permita liberarlos: durante al menos dos meses esa posibilidad estuvo vedada por Beijing, debido a que la prioridad la tenían los ciudadanos de ese país.

El plan, según confirmaron a Clarín de fuentes vinculadas a Cansino, sería que para septiembre lleguen a la Argentina entre 400 y 600 mil dosis más, en tandas de 200 mil cada una. Y que en octubre los lotes empiecen a ser más voluminosos.

Si se mira el desfase que hay entre primeras y segundas dosis de la Sputnik V (una diferencia de 6,4 millones al día de hoy) estas vacunas unidosis chinas podrían ser el comodín del déficit ruso. Pero por más presunción que haya sobre la efectividad de la combinación, es indispensable hacer antes el ensayo correspondiente. Un ensayo que aún espera.

PS