Danny León: «Me da miedo que el 'skate' pierda su esencia»

Deportes - RDN
Lectura
A Danny León (Móstoles, 1994) le construyeron una pista de 'skate' debajo de su casa cuando tenía nueve años. Cuando se cansaba de jugar al fútbol, se quedaba mirando a los patinadores
embrujado, hasta que un día se animó a pedirles que le dejaran probar un rato. Aquel chavalín se ha convertido hoy en el 'skater' más popular de España y en un deportista olímpico. Danny León y el mallorquín Jaime Mateu se lanzarán el jueves (2.00, hora española) por la pista urbana de Arake en busca de las medallas. Su competición podrá seguirse, como todos los Juegos, por Eurosport. ¿Le alegra o le preocupa que el 'skate' haya entrado en el programa olímpico? Los Juegos han admitido el 'skate' porque ahora se practica mucho y buscan una manera de ganar visibilidad entre los jóvenes. Lo que me da miedo es que se pierda la esencia. A mí me gusta patinar con gente de todo el mundo, da igual el nivel que tenga. Esto es una danza, cada uno tiene su estilo y su forma de patinar. Es muy subjetivo para juzgarlo. El 'skate' son los viajes, la gente que conoces, lo que aprendes de los demás... Eso es el 'skate', un estilo de vida. Me da miedo que los niños empiecen a patinar para competir y se pierdan todo esto. ¿Qué le cautivó del 'skate'? Que todo dependía de mí. Ahora empieza a haber entrenadores, pero antes no existían ni entrenadores ni Instagram ni Facebook ni Youtube... Todo era lo que tú veías. Te llegaba una revista o un vídeo desde Estados Unidos y de ahí sacabas cosas. Esa idea de crear tu estilo propio con tu imaginación es lo que me enganchó. ¿Todo eso se ha perdido con las redes sociales? Es muy difícil ahora ser creativo. Antes veías un truco y tratabas de sacar cien variaciones de eso. Ahora la gente ve un truco en Instagram y se pone a imitarlo en lugar de darle una vuelta e intentar crear un estilo propio. ¿Los movimientos se ensayan o es mejor improvisar? A la hora de competir, sí me preparo unos movimientos; pero cuando yo voy a patinar un día normal no planifico nada. A lo sumo tengo el primer truco pensado, pero luego me tiro y voy improvisando según la inercia, la dirección, la velocidad. Es ahí cuando se demuestra el talento que uno tiene. ¿Cuál es su objetivo en Tokio? ¿A qué aspira? Yo voy a por el oro. En nuestro caso, de los 20 que vamos puede ganar cualquiera. Es cierto que hay favoritos, gente que está más acostumbrada a ganar en competiciones internacionales, pero cualquiera puede vencer y cualquiera puede sorprender. Todos. Eso es bueno para el espectáculo. También depende de cómo le entres a los jueces por los ojos. Hay que intentar ser creativo. Pero al final es su criterio y siempre pueden pesar las modas, los favoritos... Es muy difícil hacer de juez. Ahora mismo no me gustaría estar en esa situación. En 'street' femenino, las ganadoras tenían entre 13 y 16 años. ¿Cuál es la mejor edad para este deporte? Cuanto más joven mejor porque las caídas te afectan menos. Si tienes doce años, te recuperas rapidísimo pero te falta algo de fuerza. Yo creo que entre los 20 y los 30 es la mejor edad. Yo tengo 26 y me noto fuerte, pero es verdad que las caídas me duelen más que cuando tenía 18. Habla de las caídas con frecuencia. ¿Es un deporte peligroso? Es tan rápido que no hay apenas tiempo de reacción. Tenemos los tobillos, las rodillas y las muñecas bastante maltrechos. Al final estamos saltando todo el rato y para conseguir lo que se ve tenemos que entrenar mucho y caernos mucho. Todos los días yo me caigo varias veces. Luego en los campeonatos sale todo limpio y bonito, pero cuesta mucho hacer que parezca fácil. ¿El material es determinante? Cuando estás aprendiendo no importa porque lo que estás cogiendo son las sensaciones y ese tacto de notar la tabla en los pies, la dirección, la movilidad... Pero una vez que ya estás haciendo trucos, sí que se nota el buen material. ¿Y cuesta mucho? Las hay muy baratas, pero a veces es peligroso pillar una cutre por 20 euros en un supermercado porque puede suceder que las ruedas no giren bien o que la tabla se parta... Yo recomiendo ir a una tienda de 'skate' y buscar tablas económicas, por 100 o 120 euros, que son buenas. Las que nosotros utilizamos pueden rondar los 300 euros. El problema es que a mí me duran una semana. Tal vez algún niño se anime a imitarle cuando lo vea deslizándose el jueves por la rampa. ¿Qué le diría? Que se divierta. Que se deje llevar. Si uno quiere hacer algo en la vida, se necesita siempre mucho esfuerzo, pero no hay que dejar nunca de disfrutar. En el momento en que ya no disfrutas hay que parar. Pasártelo bien es lo que te hace mejorar.

Fuente La Razon:

https://www.abc.es/deportes/abci-danny-leon-miedo-skate-pierda-esencia-202108040028_noticia.html