La imagen recorrió el mundo: el volante danés Christian Eriksen tirado en el campo de juego, rodeado por sus compañeros mientras le hacían reanimación cardíaca. Se había desplomado a los 42
minutos del primer tiempo y provocó una alarma general. Horas después desde el hospital de Copenhaguen, donde fue internado, llegó la información de que se encontraba “estable”.
“Christian Eriksen está despierto y su estado permanece estable. Permanece hospitalizado en Rigshospitalet para que le realicen más exámenes”, explicó la Federación danesa de fútbol en un comunicado oficial. Por eso, lo que quedaba del partido entre Dinamarca y Finlandia por la Eurocopa continuó.
El comunicado de la entidad escandinava agregó que el mediocampista, de 29 años, permanecerá internando en un hospital de esa ciudad “para que se le realicen más exámenes”. Su manager Martin Schoots, contó en una radio local que mantuvo un diálogo con el padre, quien le aseguró que Eriksen “respira y puede hablar”.
Cuando a Eriksen lo estaban retirando del estadio en camilla para llevarlo al hospital le tomaron una foto en la que se lo ve con su mano izquierda sobre la frente y los ojos abiertos. Esa imagen llevó cierta tranquilidad porque se lo veía consciente.
Pero minutos antes todo fue desesperación. Cuando todavía estaba tirado sobre el césped los jugadores del seleccionado de Dinamarca formaron un círculo a su alrededor para impedir que las cámaras de televisión tomen imágenes. Algunos lloraban, otros tenían un gesto de desolación.
La reacción del mundo del fútbol fue inmediata. Las redes sociales se llenaron de mensajes de apoyo. El Kun Agüero, el titular de la UEFA, el esloveno Aleksander Ceferin, el presidente de la Conmebol, Alejandro Domínguez, el portugués Cristiano Ronaldo, alemán Mesut Ozil y las cuentas de diversas federaciones y clubes del mundo, entre otras, realizaron manifestaciones de apoyo al danés.
Eriksen, de 29 años, lleva doce temporadas en el fútbol profesional desde su debut en primera división en 2009 con Ajax de Países Bajos, en el que jugó hasta finales de 2013. Luego marchó a Tottenham Hotspur de Inglaterra y desde mediados de 2019 milita en Inter.).
Los últimos tres casos dentro de la cancha
Abdelhak Nouri
El jugador neerlandés del Ajax tenía 20 años cuando sufrió una arritmia en un amistoso en 2017 que lo llevó a estar en coma durante tres años. Debido a las secuelas, Nouri tuvo que dejar el fútbol y el equipo rescindió su contrato.
Moussa Dembele
En marzo de este año el delantero de Atlético de Madrid se desmayó mientras elongaba los músculos en pleno entrenamiento. Si bien se recuperó, provocó preocupación en el plantel y siguió bajo observación.
Fabrice Ndala Muamba
El jugador congoleño sufrió un paro cardíaco el 17 de marzo de 2012 en un partido de la Copa FA entre el Bolton y el Tottenham Hotspur. Tuvo que ser trasladado a un hospital, donde fue dado de alta recién un mes después.