Las perlas que animan la vuelta de la Bundesliga

obligase a bajar la persiana. Con otras competiciones menores ofreciendo pequeños oasis para los más futboleros, caso de Bielorrusia, el regreso de la Bundesliga es una bocana de oxígeno para el aficionado. En esas, y hasta que el proceso de desescalada permita que ocurra lo mismo con los torneos de cada país, con España e Inglaterra apuntando al fin de semana del 12 de junio como fecha de regreso e Italia ya con los equipos de vuelta a los entrenamientos (a la espera de recibir luz verde del gobierno para ponerse a trabajar en la vuelta de la Serie A), lo lógico para el sediendo de balón es ponerse a mirar la tabla, el calendario y las aspiraciones de cada equipo en Alemania, la liga de todos hasta que cada uno pueda mirar a lo suyo. Destaca el país germano por aglutinar uno de los puñados de jóvenes más sugerentes del continente. Desprovisto el campeonato de estrellas rutilantes más allá de las que logra reunir el Bayern -quien no obstante anda falto de referencias de primerísimo nivel desde los mejores tiempo de «Robbery», si acaso con la salvedad de Neuer, Kimmich o Lewandowski-, se imponen las joyas de porvenir ilusionante. El Borussia Dortmund es uno de los caladeros mundiales más importantes en este sentido. Su impronta como vivero en el que desarrollar el talento con una cuota de éxito altísima está de sobra contrastada, desde los tiempos en que Jürgen Klopp ejercía como orfebre hasta la actualidad, con los nombres de Jadon Sancho y Erling Braut Haaland como grandes cabezas de cartel del proyecto de la cuenca del Ruhr. Ambos suenan ya con fuerza para reforzar las plantillas más poderosas del fútbol europeo, si bien la actual crisis podría provocar un retraso en su salida. Sin salir de Dortmund encontramos otro futbolista que ha subido como la espuma en el último año y medio, el de Achraf Hakimi, el marroquí que llegó al Wesfalen cedido por el Real Madrid como lateral y brilla ahora en un papel híbrido, tan destacado en la retaguardia como ejerciendo de extremo punzante. Gio Reyna, de sólo 17 años, es una de las grandes irrupciones de la temporada. Nacido en Inglaterra pero internacional con Estados Unidos, el país de su madre, se ha ganado un sitio entre los revulsivos del equipo de Lucien Favre. Por seguir con los equipos punteros, el Bayern de Munich cuenta en sus filas con uno de los proyectos de jugador de banda más ilusionantes del momento, Alphonso Davies. Extremo de origen, el canadiense supo reconvertirse al lateral para hacerse con la titularidad en una plaza del calibre del Allianz Arena, hasta el punto de ganarse el reconocimiento como una de las revelaciones del curso. Uno que podría llegar próximamente a Baviera es Kai Havertz, sin duda uno de los mejores futbolistas del campeonato. Su salida a un grande, a sus 20 años, es cuestión de tiempo, asunto ya reconocido en los despachos del Bayer Leverkusen, el club para el que juega. Centrocampista fino, de zancada larga y mucha llegada, es ya habitual en la selección alemana. Por el momento, comparte camiseta con Moussa Diaby, velocísimo atacante de la cantera del PSG, o Exequiel Palacios, el centrocampista que ganó la Libertadores con River Plate en el Bernabéu y que sonó para el conjunto blanco. El Leipzig, justo por detrás del BVB en cuanto a la facilidad para pulir talentos, acumula talento a chorros en todas las líneas del campo, jovencísimo el equipo que comanda Julian Nagelsmann, el entrenador, curiosamente, más joven de la Bundesliga. Desde Dani Olmo, fichado el pasado verano a buen seguro bajo el estímulo que supone para alguien de su proyección recalar en el club de la famosa bebida energética, hasta Christopher Nkunku, centrocampista de molde moderno y dinamismo exagerado, el ataque del cuartofinalista de la Champions es toda una colección de futuribles de presente notable. También atrás, donde jugadores como Dayot Upamecano se están ganando un contrato importante en un grande. Amine Harit, del Schalke 04, o Marcus Thuram, del Borussia Mönchengladbach, son otros futbolistas por los que merece mucho la pena invertir un par de horas en uno de los partidos con los que la Bundesliga reabre sus puertas este fin de semana. Si es que hacían falta alicientes para volver a disfrutar del fútbol.