“La última clase descubierta de este tipo de ARN no codificante son los llamados ARN circulares, que se diferencian de los demás en el hecho de que forman círculos, mientras que
los más comunes son lineales y, por distintas razones en las que no vale la pena profundizar, son más inestables, ya que tienden a deteriorarse, justamente en los extremos. Como la circularidad no tiene extremos, le confiere a este ARN una propiedad única, que es ser moléculas particularmente estables”, describió.