Antes de las lluvias, "restaban por cosechar una cuarta parte de los campos de soja", de ellos, "una parte se pudrirá y se perderá, y la otra tendrá rendimientos inferiores a
los esperados", advirtió.
Antes de las lluvias, "restaban por cosechar una cuarta parte de los campos de soja", de ellos, "una parte se pudrirá y se perderá, y la otra tendrá rendimientos inferiores a
los esperados", advirtió.